martes, 17 de marzo de 2015

TOMAD UN PUÑADO DE TIERRA...


"Tomad un puñado de tierra, mantenedla un momento en vuestra mano, pensad en todos los elementos que han sido depositados en ella por el Creador para que la multitud de plantas y, a través de ellas, todas las criaturas vivas puedan encontrar en ella su subsistencia. En nuestros días, desgraciadamente, la mayoría de las frutas y de las verduras que comemos están impregnadas de influencias negativas – ¡sin hablar incluso de los abonos y los pesticidas! Con el tiempo la tierra se ha convertido en un inmenso cementerio regado por la sangre de los humanos, impregnada de sus crímenes. Y como los que la cultivan lo hacen a menudo sin respeto, sin amor, o incluso en un estado de rebeldía interior, sus pensamientos y sus sentimientos entran en las semillas y las envenenan. Por ignorancia la humanidad no cesa de crear unas condiciones de vida malsanas.

¡Qué útil sería volver a aprender el arte de la agricultura de acuerdo con las reglas iniciáticas! Estas reglas fueron conocidas y respetadas en ciertas civilizaciones del pasado, y quizá lo sean un poco aún en nuestros días en alguna parte del mundo. Aquellos que las seguían sabían trabajar con las energías cósmicas, con el fin de que las semillas confiadas a la tierra captasen estas energías y diesen a las verduras y a las frutas el máximo de virtudes nutritivas y curativas."
Omraam Mikhaël Aïvanhov


Gracias Mary Mag por acercarme este texto.

2 comentarios:

Societat Teosòfica- dijo...

Quizás algún día cuando seamos conscientes de que cada uno de nuestros actos está afectando al suelo de la tierra y suframos las consecuencias en nuestra propia carne, no tendremos otro remedio que cambiar nuestra indiferencia por el respeto y el amor a la Tierra.
Todo cuanto afecta a la tierra nos afectas a la totalidad de seres que vivimos en ella, ya que la Tierra es un Cuerpo y nosotros una de sus células.
Es triste que sea así, pero parece ser que la humanidad únicamente aprendemos de nuestros errores cuando sufrimos las consecuencias.

Gracias Marcos.

Un fuerte abrazo
Marta

J. Marcos B. dijo...

Muy cierto es lamentablemente Marta...

Como de costumbre, Muchas gracias por tus bienvenidas palabras.


Un fuerte abrazo.