jueves, 22 de enero de 2015

VER...

"ANTES DE QUE LOS OJOS PUEDAN VER, DEBEN SER INCAPACES DE LLORAR."
Es necesario recordar que éstas palabras han de leerse en su sentido oculto, no en su sentido ordinario (literalmente). También es necesario recordar que esta regla se dirige al discípulo y no al hombre ordinario. Estos dos hechos apartan al estudiante del peligro de suponer que los sentimientos humanos y el amor humano han de ser eliminados del carácter del hombre. 
El discípulo es aquella naturaleza mística que surge dentro del hombre y llega a su florecimiento en su vida interior, pero su raíz y poder sobre la tierra se hallan hondamente plantados en el sentimiento humano y en el amor humano.
Cuando “los ojos puedan ver” indica aquel estado de un discípulo que es ya un yogui altamente avanzado y ha llegado a ser “El vidente, o la visión simple”. En ese estado obtiene él conocimiento pleno y completo del universo fenoménico, que es “la vista” (todos los objetos fenoménicos en su condición oculta e interna, aquello que él mira….Todo el universo fenoménico fue hecho surgir a la existencia tan sólo para experiencia y desarrollo del alma del hombre…Éste es el “ver”  del primer aforismo de “Luz en el Sendero” y antes de que el discípulo alcance tan gran poder de obtener conocimientos habrán cesado para él toda pena, toda aflicción y tristeza, porque él conoce la Verdad; y las lágrimas han sido enjugadas en sus ojos para siempre.
MABEL COLLINS


GRACIAS A 'LAVIDA UNA' por la foto y el extracto :)

3 comentarios:

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

Cuando el discípulo está completamente desnudo sus ojos se abren de par en par. Todo su entorno forma parte de el.


Un abrazo.
gracias.

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

Cuando el discípulo está completamente desnudo sus ojos se abren de par en par. Todo su entorno forma parte de el.


Un abrazo.
gracias.

J. Marcos B. dijo...

Cierto Olga.

Gracias por estar :)

Un abrazo