viernes, 30 de marzo de 2012

¿ATRAES O REPELAS…?


Hay dos tipos de personas: los que dan solo cuando reciben, y otras, que siempre dan sin esperar nada a cambio.

No atraerás lo que deseas si no lo das primero…
Todo funciona al revés como ya algun@s bien sabemos.

Hans Christian Oersted fue quien evidenció en 1820 por primera vez que una corriente eléctrica genera un campo magnético a su alrededor. En el interior de la materia existen pequeñas corrientes cerradas al movimiento de los electrones que contienen los átomos; cada una de ellas origina un microscópico imán. Cuando estos pequeños imanes están orientados en todas direcciones sus efectos se anulan mutuamente y el material no presenta propiedades magnéticas; y en cambio, si todos los imanes se alinean, actúan como un único imán y en ese caso decimos que la sustancia se ha magnetizado.

Tal un imán que consta de dos polos, denominados polo norte y polo sur, o, alternativamente, polo positivo y polo negativo, funcionan nuestras mentes. Según nuestro enfoque, atraemos o repelemos gracias a nuestro cerebro que, casi siempre alterna en positivo y en negativo. Los polos iguales se repelen y los polos distintos se atraen.

Recordando que nuestro cerebro esta hecho básicamente de átomos; átomos que -como hemos visto- contienen electrones que originan un microscópico imán, me pareció interesante acercar esta comparación con un simple imán que solo puede atraer hierro.

Nuestra mente siempre esta balanceando lo positivo y lo negativo de cada deseo, o decisiones que nos planteamos. Si deseamos por ejemplo encontrar a una pareja, alguien que nos corresponda, alguien con quien podamos conectar y convivir de verdad, se nos plantea tantas cosas y nos dispersamos tanto, que a veces hasta preferimos quedarnos solos la verdad…! Y lo estamos o muchas veces lo que hacemos es atraer otra persona igual que la anterior, solo que, cambio de cuerpo. En realidad lo que deberíamos hacer en ese caso, es darnos amor a nosotros mismos en prioridad, y al rebozar, darlo a los demás, por lo tanto atraeríamos más amor y un ser que vibrará en total armonía con nuestro amor y deseo de pareja. 

Hay que dar lo que deseamos recibir… dar, Dar y DAR y con amor mucho mejor. Sí, con amor, porque al filtrar por el corazón uno amplía de forma impresionante su campo de atracción. Un imán normal tiene un campo limitado según su tamaño. El campo del corazón humano amoroso es ilimitado, atraviesa todo el campo electromagnético en el cual bañamos. Por eso sentimos a veces lo que le ocurre al ser amado aunque esté a miles de kilómetros. 


Uniendo esos microscópicos ‘imanes’ (al dirigir nuestro pensamiento hacia ‘el dar’ lo que más necesitamos), creamos un polo magnético de atracción importante y afine a lo que estamos enfocando. Es decir, polarizamos los átomos de nuestro cerebro al igual que los de un imán con su doble polaridad, los extremos se oponen en carga, uno atrae y otro rechaza. Pero aunque sus extremos son opuestos hacen parte de un mismo sistema. Yo les llamo: los ‘átomos ganchudos’. Cuando los das, se enganchan con otros afines ahí fuera.

La polaridad genera una dinámica de fuerzas magnéticas que genera un flujo de energía. Cuando las personas se enfocan solo en recibir, van en contra de ese mismo flujo de energía. La energía fluye en forma circular y cíclica, y ubicar nuestras actitudes en dirección a este flujo de energía nos permite fluir, o ir en contra de la corriente…

Si observamos bien, todas las más antiguas tradiciones espirituales e incluyendo el testimonio de los más grandes líderes de ayer y hoy, nos recuerdan dos enseñanzas básicas:  

PARA RECIBIR HAY QUE DAR PRIMERO, y HAY QUE DAR DE AQUELLO QUE UNO MÁS NECESITA.

Sea el conocimiento, sea apoyo, sean palabras de aliento, amor, metáforas transformadoras o alimento para el cuerpo, el alma o el espíritu, o, lo que sientas en un momento dado, aquello que des te llegara multiplicado.

Cuando alguien orienta su mente a la actitud de recibir primero, va en contra de la corriente electromagnética, y el proceso genera debilidad y dependencia, es como auto vampirizarse, no sirve. En cambio cuando direccionamos nuestra mente en dar primero, fluimos con la corriente y ese proceso nos genera una gran energía, aunque podamos pensar lo contrario por ahora… Por eso, como digo siempre, ¡prueba amig@!, no hay nada mejor que probar y no se pierde nada en hacerlo. Enfoca tu expectativa y actitud en dar primero y dar aquello que más anhelas, y observa que ocurre.


De todo este análisis sobre una intuición que tuve duchándome, surge una idea muy interesante y útil a mí sentí-entender: 

Podemos girar nuestras mentes y orientarlas hacia una cierta dirección, y no estamos determinados por ellas. Es decir: estamos al mando. 

Y, en conclusión lo mejor de todo es que todo esto es aplicable no solo a las personas, sino y también a las familias, grupos, equipos de trabajo, empresas, etc… 

Caminar hacia la perfección, la sabiduría, se logra teniendo la capacidad de retroceder una y otra vez a los primeros pasos que dimos aplicando siempre las nuevas enseñanzas.

Como bien dijo Buda: 'Todo existe por convención, pero en realidad solo hay átomos y espacio...'

Un abrazo zen, Marcos.

jueves, 15 de marzo de 2012

DETRAS DEL MURO...

Tu deseo esta detrás del muro de tus pensamientos.


Basta con que dejes de desear lo que más anhelas
 para que te llegue...

Cuando por fin olvidamos lo que tanto deseamos, -como por arte de magia-, se materializa en nuestra vida.
Es increíble pero cierto, en mi caso por lo menos.  Más de una vez, es cuando abandono por completo el deseo, que al fin me llega lo que tanto quería... 
Unos ejemplos: Llega la persona que esperamos cuando ya no la esperamos, encontramos las llaves cuando ya no las buscamos, llega el dinero que necesitamos cuando ya estamos agotados de pensar en como vamos a conseguirlo, llega el amor de nuestra vida cuando dejamos de buscarlo; etc...
Más nos aferramos al deseo, más perseguimos lo soñado, más nos huye... sea lo que sea. La idea es desear claro, es perfilar, saber lo que queremos, si, pero luego dejar fluir confiando amorosa-mente en que ya está todo en marcha para satisfacer lo que tanto anhelamos.

El 'Pensar' crea una substancia llamada hoy neuropeptidos*. Personalmente la asimilo a una materia que al acumularse en nuestro cerebro, llega a crear como paredes mentales que se interponen para que nuestro deseo pueda realmente salir al cosmos y conectarse con el Universo allí fuera y que por fin se unan las posibilidades y podamos disfrutarlo. 
 Demasiado pensar es fracasar a mi sentí-entender. No nos puede llegar nada si siempre mantenemos la presa cerrada, el agua no puede fluir y por lo tanto el río no sirve para que puedan navegar los barcos repletos de todo tipo de deseos.

Feliz fin de semana amig@s, y como siempre, 
gracias por estar a tod@s.  
Marcos.



*Las investigaciones médicas y científicas han concluido que el enemigo más temido por el organismo no son los microbios, no, son los pensamientos y las palabras de cada día.
  La ciencia ha descubierto que cuando se tiene un pensamiento el cerebro produce sustancias que abren lo que se podría llamar una ventana. Cuando el pensamiento concluye la ventana se cierra. Por ejemplo, cuando uno ve a la persona de sus sueños y siente amor y esa sensación increíble que le recorre el cuerpo no es otra cosa que una sustancia química.  Los Neuropeptidos son una cadena de dos o más aminoácidos, unidos por puentes peptídicos que se diferencian de otras proteínas sólo por la longitud de su cadena de aminoácidos. También se llaman neuromoduladores o cotransmisores-. Extracto y saber más: http://grupoelron.org/autoconocimientoysalud/jo_060508_neuropeptidos.html