martes, 4 de febrero de 2014

EN EL MOMENTO DE LA MUERTE…




Debo estar sereno en este momento, cuando se ha parado el tiempo de este vehículo que ocupo y poco a poco me empiezan a desconectar.

Debo ser fuerte para aislar los sentimientos que me llegan de mis seres queridos, porque aún no comprenden lo maravilloso de este paso que estoy dando y en su egoísmo tratan de retenerme junto a ellos.

Debo estar contento en este momento porque he terminado como un trayecto de experiencia sobre la escuela Planetaria Tierra y ahora me elevo al Nivel de donde soy para acariciar el Tono de Luz donde vibro.

Debo estar satisfecho porque todo cuanto hice me llenó de conocimiento de mí y todo cuanto comprendí me trajo una lección y todo cuanto sufrí me hizo una limpieza del lastre de mi ignorancia.

Debo estar preparado para recibirme a mí mismo, y verme en el esplendor de mí ser y desplegar las alas de mi sabiduría para adentrarme en el mundo real donde ya no me oprime la materia del vehículo planetario.

Debo visualizar a aquellos Seres de Luz que me acompañaron por la vida, para que se acerquen y me ayuden con la radiante energía de su Amor.

Debo mirar hacia la izquierda abajo para ver mi vehículo planetario inerte y quieto, sin vida, porque la Vida soy yo y estoy ya fuera de él.

Debo mirar a la derecha, hacia arriba, para esperar a que me traigan la Luz.


CAYETANO ARROYO




VISTO EN CONTACTO EL ALMA

4 comentarios:

Dani Dofinet dijo...

La muerte; da toda una vida (vidas) hablar de ella.

Abrazos

Societat Teosòfica- dijo...

La muerte no existe!
Si fuéramos plenamente conscientes de que no hay rompimiento alguno de una vida a otra sino una eterna continuidad, perderíamos el miedo que tanto nos atemoriza.
Es natural sentir temor hacia todo aquello que desconocemos, por esta razón aún no creemos en la inmortalidad del Alma, aunque en teoría lo sepamos y ni tan solo nos identificamos con ella, pues si fuera así sabríamos que lo que la personalidad entiende como muerte, para el Alma es Vida, y que la muerte únicamente existe para quienes todavía nos identificamos con la forma.

Gracias Marcos por esta sentida y esperanzada reflexión.

Un fuerte abrazo

Marta

J. Marcos B. dijo...

“No existe la muerte, sólo cambian las condiciones de vida.”

Annie Besant


Gracias por tu visita Marta :)

Un fuerte abrazo.

J. Marcos B. dijo...

Un abrazo Dani, gracias por dejar unas palabras :)