lunes, 23 de noviembre de 2009

IRA...


AL LEER A NUESTRO amigo Bernabé Tierno, me entraron las ganas de preparar este post. Me recordó a varias personas que crucé por el camino... Todo tiene una explicacion clara y sencilla para el que de Verdad quiere comprender y crecer, y hoy me apetece la IRA por la cual todos hemos pasado un día u otro. Prefiero retransmitir las palabras de Bernabé tal cual las escribe en uno de sus muy buenos libros. Os sugiero leer con mucha atención, sobretodo si sois iracundos cascarrabias compulsivos o tenéis a uno cerca...


Necesidad imperiosa y desmedida de descargar la ira, de mostrarse furioso e indignado de manera injustificada.


Quien nunca se ha indignado no es humano. La ira, la indignación es una emoción justificada y normal en muchisimas ocasiones. Sentimos una indignación comprensible cuando nos enteramos de que una mujer a denunciado varias veces que es maltratada y finalmente muere víctima de malos tratos a manos de su pareja. Sentimos una ira lógica cuando un miserable caradura explota a inmigrantes y les paga cuatro peras y experimentamos una indignación fundada antes terribles situaciones en que los seres humanos son privados de su libertad, masacrados, envilecidos y escarnecidos; al igual que existe una profunda indiganción anta la injusticia, la television basura y tantas otras cosas.

Es decir que está justificado el enfado cuando cualquier persona buena y ensu sano jucio se enfadaría; pero no sólo está justificado el enfado en tales circunstancias sino que es digno de alabanza y de reconocimiento, porque gracias a esa santa y noble ira necesaria de tanta buena gente el mundo a mejorado en infinidad de cosas.

Dejemos claro, por tanto, que hay determinadas reacciones de ira que han permitido que el mundo y las cosas vayan a mejor. En el ámbito laboral, de la política, de la convivencia humana, de los derechos humanos, la ira nos llevo a reaccionar ante algo que considerábamos injusto, inhumano o innoble y gracias a ella se hizo algo por mejorar esas cosas.

¿Cuándo la ira y la indignación se convierten en un problema?

Cuando se utiliza la indignación como tapadera de nuestros descuidos, fallos, injusticia y reacciones innobles. Entonces la furia se desata con toda su virulencia para acallar la propia consciencia, negar la evidencia, atemorizar o confundir al contrario; todo menos enfrentarse a la Verdad y las propias emociones incontroladas.

La indignación ya no tiene como propósito responder o reaccionar ante una injusticia, una traición, sino que se monta en cólera para obtener cualquier objetivo y alimentar el propio ego a expensas del bien de los demás. Las personas con una necesidad imperiosa de descargar la ira se expresan y llegan a un alto grado de indignación sin tener verdaderos motivos, por nada. Han observado que con su furia desmedida les sube la adrenalina, alimentan su ego, se imponen más fácilmente a los demás y casi siempre logran lo que desean; de ahi que hagan la furia una necesidad.

Del contratiempo al arrebato de ira en breves instantes. Cualquier persona normal pasa de manera gradual desde el simple contratiempo, contrariedad o fastidio a unos niveles de mayor irritabilidad, y no siempre se llega a la ingignación y a la explosión de ira porque ha habido tiempo para la reflexion y para enfrir la mente y razonar. De no ser así, el proceso normal desde una simple contrariedad hasta un arrebato de ira es como sigue:

a) Algo nos molesta, nos fastidia, se interpone en nuestro camino y nos contraría.
b)Según nuestra capacidad de reflexión, autocontrol y aguante, según el momento y la situacion personal en que nos encontramos y las características de la situacion o de la persona que nos fastidia, la contrariedad se convierte en frustración más o menos soportable. Si el grado de frustración y de malestar interno nos produce desazón y juzgamos que es injusto e intolerable lo que nos está sucediendo, pasamos al nivel c.
c) Irritabilidad, verbalizaciones violentas y subidas de tono que casi siempre nos conduce al nivel d.
d) El arrebato de ira, con o sin violencia verbal y física.

Diríamos que éste es el proceso que va in crescendo desde el simple contratiempo a la explosión iracunda; pero, ¿qué les sucede a las personalidades explosivas sin control sobre sus emociones? Que pasan en breves instantes del simple contratiempo al arrebato de ira, se disparan como si en su interior existiera un interruptor que se activa por si mismo. Seguramente el lector recordará a alguien cercano...que ante una simple contrariedad y en un instante se ha convertido en un energúmeno, en una fiera incontrolada, lleno de furia y rabia y sin control sobre sus palabras y actos.

"Piensa cuánto más dolorosas son las consecuencias que las acciones que la han originado" MARCO AURELIO.


Quizás seguirá otro post sobre los remedios... Un abrazo zen, Marcos


6 comentarios:

josé maría dijo...

Hola Marcos, conocí a Bernabé Tierno en unas charlas en Barcelona y he leido varios libros, es una exelente persona y un gran maestro. Si aplicamos el pricipio de que todo lo que va luego vuelve, tendríamos más cuidado al dejar ir nuestra ira hacia el otro.

Quizás no venga mucho al caso pero te dejo esta perla aquí:
"No es lo que aprendes lo que hace que tu vida mejore, sino lo que pones en práctica de lo que aprendes."

FAZEN

J. Marcos B. dijo...

Si , viene muy bien Jose maria, siempre viene bien recordar lo esencial...Muchas Gracias por tus palabras y la cita. Fazen, Namasté.

jose angel dijo...

Hola Marcos,

este es un muy buen tema, la ira es una de las pasiones que mas daño le esta haciendo a la humanidad, ahora en Mexico estamos pasando por una etapa de mucha violencia, necesitamos aprender mucho sobre ella para vivir en paz.

los pensamientos producen emociones, o sea, energia que nos impulsa a actuar. El dejarnos llevar por esa reaccion es lo mas comun, aprender a no seguir los impulsos es lo que nos hace crecer espiritualmente.

te quiero compartir algo que yo hago cuando tambien percibo esa energia en mi cuerpo: imagino que soy una bateria (pila, o como le llames) y que mis manos son cables, busco un arbol y pongo mis palmas sobre el, entonces imagino que toda la energia que me sobra se la envio al arbol y hacia la tierra. Cuando ya me siento mas equilibrado le agradezco al arbol y al planeta por regresarme mi equilibrio.

estare pendiente de la segunda parte de este post.

un abrazen.

Al

Maria de los Angeles dijo...

Cuando la ira promueve cambios, es santidad no impulso porque si, y hay que ser muy valiente para dar la cara por los que sufren, asi la humanidad fue erradicando las injusticias, hoy mas que nunca hay que tener ira, pero de la buena...
Un beso!!

Drago dijo...

También estoy leyendo el "aprendiz de sabio" de Bernabe Tierno. No había leído nada de el y me parece un gran maestro. En cuanto a la ira, mejor no despertarla.
Un abrazo.

J. Marcos B. dijo...

La ira puede ser muy buena como bien lo explica nuestro querido amigo Bernabé y lo apunta Maria de los Ángeles.

Si, y el remedio esta en ser empáticos, calmarse y respetar a los demás y VER si la ira está justificada o por lo contrario se utiliza para obtener lo que deseamos, acallar nuestra consciencia y alimentar nuestro ego a expensas de los demás, como lo explicara la segunda parte de este post maravillosamente explicado por Bernabé Tierno.

Jose Angel, haces bien en descargar la ira y después dar las Gracias, digamos que compensas de esa forma. La idea es no dejar subir esa energía si no es para bien, es decir, ser consciente de que no sirve, Ver en el instante lo inutil que va a ser discutir sobre temas estériles.

Dejo una cita de Aristóteles que leí también en el libro de Aprendiz de Sabios como bien indica Chencho:

"Cualquiera puede enfadarse, eso es fácil. Pero enfadarse con la persona adecuada, en la medida correcta, en el momento oportuno, con el propósito adecuado y la manera conveniente, eso no está al alcance de cualquiera no resulta fácil".

Muchas gracias a tod@s por vuestros comentarios.

Namasté.