Cuando entrenamos el cuerpo, todo nos duele, pero cuando logramos el objetivo, decimos: valió la pena.
También se aplica a nuestro mundo interior; con paciencia y entrenamiento, encontramos la llave del paraíso.
Namasté. Marcos
...BLOG DE INDAGACIÓN SUB-CUTÁNEA... NAMASTÉ. ¡BIENVENID@S! y ... lo que me desees, para ti el doble.
5 comentarios:
Y esa llave nos dará el elixir de la eterna juventud en el aquí y ahora.
Grácias.
Estoy contigo. Sabia reflexión.
Joé ,pues va a ser eso...ahora estoy con gripe y me da una rabia!!cuando no tengo una cosas tengo otra y eso me desanima :(
UN BESAZO CON MASCARILLA
Para que haya equilibrio entre cuerpo y mente deben ser entrenados por igual el esfuerzo
vale la pena.
Un abrazo de luz
Si Marisa, vale la pena mover las DOS.
Muchas gracias a tod@s por estar :)
Namasté
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